Para entender lo complejo de la realidad es importante actuar con simplicidad. Muchas veces sin querer existe en nosotros una tendencia a complicar lo simple y enredar lo fácil. En un mundo en el que estamos tan pendientes del afuera, en fabricar una fachada que sea socialmente aceptable, podemos caer en alguna que otra trampa.
Quizás una de las claves es mirar las cosas que suceden alrededor sin filtros, tratando de hacer lecturales menos rebuscadas de lo que el mundo real nos propone. El punto es poder conseguir una simplicidad espontánea , que surja natural que nos ponga en una sintonía especial. No vale la pena complicar las cosas, ni dejarnos complicar.
Podemos comparar esta situación con hacer un viaje, dispuestos a estar frente a realidad diversas, con los ojos bien abiertos y sin preconceptos, trasladandonos sin prisa con una pequeña mochila predispuesta al asombro. Parece una pavada pero debemos dejarnos sorprender y ver a partir de ahí que sucede. Veamos con que cargamos la mochila.
Optimismo: algunos hablan de dos tipos, uno que siempre alienta a más, y el que solo sacamos a la luz cuando se viene lo difícil, tratemos de ser constantes en esta sintonía. Sería algo así como pensarnos en dos situaciones; como pasivos o activos frente a las respuestas que nos pide la vida.
Imaginación: me gusta pensar en este término como un elemento interno activador. Qué recursos internos tengo, para enfrentar la realidad, que herramientas creativas, de innovación, me sirven a la hora de ponerme a prueba. Si tenemos todo nuestro capital puesto en el afuera, en cosas externas vamos a estar en un problema, porque más temprano que tarde vamos a descubrir que lo que realmente nos salva, es lo que está dentro nuestro, porque de por sí, es lo único que llevaremos siempre con nosotros.
Logros: no importa si son pequeños o grandes, lo importante es la valoración que nosotros le podamos dar, y más que nada estar atentos a celebrar lo que tenes, lo que sos, y lo que podes hacer.
Exploración: vivamos sin estar pendientes de ir detrás de modelos, que sembramos o sembraron en nuestra mente. Tratemos de vivir cada instante del presente, recuerda que es tu mirada lo que vuelve valiosa las cosas, no te distraigas con cosas que te restan energía.
Red social: siempre es importante tener aliados en tu camino, personas que te dejen algo, de las que puedas aprender y que sumen a tu vida buena energía. No significa que siempre te van a decir lo que vos esperas, sino que te dirán lo que vos necesitas, aunque no lo entiendas en el momento, alguien al que le importas en serio, sabe que te pasa y qué palabras pueden darte un crecimiento.
Costumbres sanas: hay algunas cosas que forman parte de nuestra rutina que nos aportan estabilidad y confianza, es importante que analices... qué de esas cosas que haces habitualmente te ayudan, y cuales deberías abandonar.
Roles: trata de darle una valoración distintiva a cada uno de los roles que ejerces en la vida, todos tenemos distintos bonetes que van definiendo a lo largo de nuestra historia un personalidad, un modo de hacer y ser. Busca también otras variantes, los viajes, los recreos, los hobbys , etc pueden darnos esa posibilidad, de experimentar algo nuevo y vernos desde distintas perspectivas.
Asombro: tener una mente dispuesta a dejarte sorprender, no cerrarse a nuevas experiencias, tener lo que se llama "mente de principiante", no siempre es necesario saber todo e ir por caminos conocidos, a veces es bueno perderse un poco, o no tener idea de algo, en eso descubrirás nuevas emociones e ideas para tu vida.
Si no hay deseo, no pasa nada. Pregúntate ... por qué hago lo que hago ? . Sería bueno que podamos conectarnos con nuestras emociones y contestar esta simple pregunta, la respuesta está en vos, solo tenes que ser sincero y darte una respuesta.